domingo, 20 de mayo de 2012

INTRODUCCIÓN



Técnicamente cualquiera puede ser un asesino serial, ¿qué es lo que provoca que algunos lo sean y otros no?, aún no lo sabemos, el cerebro humano es un enigma para la ciencia, la más de las veces se ha comprobado que el asesino serial no padece ningún trastorno psicológico y que realiza los asesinatos plenamente consiente de lo que hace, algunos los justifican al decir que sufrieron algún trauma de carácter sexual o psicológico en su niñez o adolescencia, sin embargo, si así fuera, este mundo estaría lleno de asesinos en serie y no habría gente normal.

Los especialistas han determinado que el abuso infantil sea cual fuere el tipo y la gravedad del este, no determina que la victima se convierta en un futuro en un asesino serial, sin embargo la mayoría de los asesinos seriales culpan a sus padres sin embargo las acusaciones son exageradas en gran medida, muchas veces influenciados por las preguntas dirigidas a este tema que realizan los psicólogos y que en ocasiones son aprovechadas de manera deliberada por el criminal quien por lo general es sumamente inteligente para causar lastima o atenuar sentencias.

Aún así hay casos en que la crueldad de los padres si ha sido algo terrorífico para el niño que después se convirtió en asesino, van desde madres sobre protectoras o totalmente distantes, padre o madre alcohólica, madres santurronas reprimidas sexualmente o pervertidas, padre o madre golpeadores y padres misóginos, no puede faltar el fanatismo religioso o padres que imponen disciplina de manera por demás violenta.

Mucho se habla de la triada fatídica, tres factores que están casi siempre presentes en el historial de un asesino serial.
Piromanía
Crueldad con los animales
Incontinencia o enuresis

La piromanía esta directamente relacionada a la actividad sexual, el asesino serial ve en quemar una propiedad material el poder de destruir algo, lo que pasa fácilmente de ser algo material a destruir una vida humana, el fuego es excitante para el pirómano y siente el poder de acabar con algo.

La crueldad con los animales es como una practica o ensayo para un incipiente asesino, la finalidad es sacar el estrés y frustración descargándolo en seres indefensos para poder sentir el poder.

Orinarse en la cama es uno de los síntomas menos conocidos dada la naturaleza intima de este hecho, sin embargo se estima que un 60% de los asesinos seriales sufrieron de enuresis en la niñez y algunos aún en la adolescencia algo sumamente curioso dado que algunas personas con lesiones cerebrales o retrasos mentales leves son capaces de controlar esta situación a edades más o menos aceptables y el asesino serial a pesar de ser una persona extremadamente inteligente y que entra dentro de lo que se considera un niño normal, no logra controlarse.

Hay otras situaciones que pueden sumarse a esta triada como por ejemplo si fueron o no adoptados, si fueron muy violentos de niños, si estuvieron recluidos en reformatorios juveniles etc., etc. Al saber que fueron adoptado lo primero que llega a su mente es el rechazo del que fueron objeto por sus padres biológicos y si al pobre se le ocurre buscar a sus verdaderos padres y es rechazado de nuevo la cosa puede empeorar. Los reformatorios fueron y algunos son aún lugares donde los internos sufren vejaciones y en ocasiones hasta tortura lo que convirtió y aun convierte a muchos en verdaderos delincuentes.

Lo cierto es que muchos niños y adolescentes cumplen con todo el perfil que se supone creo un asesino serial y sin embargo no lo son, muy al contrario son personas normales, exitosas y productivas a la sociedad, es decir, tal vez nunca sabremos realmente que es lo sucede en un cerebro para que una persona se convierta en un asesino serial.

Descripción

No es fácil definir un perfil del asesino en serie promedio; sin embargo, a continuación se presentan algunas semejanzas entre ellos: Poseen una infancia traumática o quedaron marcados por algún acontecimiento relevante durante su niñez. Algunos son abusados emocional o psicológicamente por sus padres. Desde niños provocan incendios o sienten placer torturando y matando animales.

Recientemente se confirmó que 95% de los asesinos capturados presentan traumas en la parte frontal del cerebro, lo que indica un nivel de agresividad mayor que el promedio. Su nivel intelectual está por encima del normal. Tienen diferencias polarizadas con la religión. Algunos reniegan de ella y otros dicen ser enviados de Dios. as estudioso de perfiles criminales de asesinos en serie han establecido características específicas en la manera en que cometen sus crímenes, de tal forma que determinaron dos posibles tipos de asesinos: el organizado y el desorganizado.
Las tres cuartas partes de los asesinos seriales son organizados y usualmente tienen un coeficiente intelectual por encima del promedio, por lo que poseen un nivel de autoestima elevado y se sienten superiores a los demás; la mayoría posee una apariencia física normal e incluso, atractiva y no son capaces de mantener relaciones afectivas duraderas.
Los asesinos desorganizados son criminales solitarios y sus actos son consecuencia de constantes frustraciones, algunos de ellos tienen un bajo nivel intelectual y padecen de algún desorden mental. Reflejan un comportamiento relajado ante los demás. Pueden llegar a percibirse como carismáticos. Algunos logran pasar un examen de polígrafo (detector de mentiras).
Logran manipular a sus víctimas a través de una representación casi real de simpatía, ya que no pueden sentirla.

¿Qué distingue a un asesino serial del resto de las personas?

Los asesinos en serie son artistas del terror, cuyo lienzo en blanco lo cubren sus víctimas y el ingenio de sus pinceladas son el último retoque para finalizar una obra maestra aterradora.
Puede afirmarse que la mayoría de los asesinos seriales reflejan características psicopáticas en su personalidad. Según el psicólogo H. Hartmann, se conocen como psicópatas “depredadores” porque no distinguen el límite entre el bien y el mal y, sin alucinaciones, cometen actos de extrema crueldad. Esta incapacidad para experimentar sensaciones es semejante a la que le ocurriría a una persona normal frente a la muerte de un insecto. Otros asesinos presentan personalidades psicóticas y esquizofrénicas.
Según Steven Egger, profesor de criminología en la Universidad de Illinois, los asesinos en serie tienen las siguientes características: Deben asesinar entre 3 y 5 víctimas mínimo, con un período de tiempo estable entre cada muerte.
Reflejan su sadismo en los asesinatos que comenten y su supuesta “superioridad” frente a los demás. En su mayoría, las víctimas no guardan relación con el asesino. El motivo es psicológico, mas no material. Las víctimas tienen un valor simbólico.
Normalmente, el asesino escoge víctimas vulnerables.
No todo individuo que haya maltratado a animales acabará siendo un asesino en serie, pero casi todos los asesinos en serie cometieron actos de crueldad con animales. Dr. Randall Lockwood, psicólogo, vicepresidente Humane Society of the USA. "La crueldad hacia los animales no es una válvula de escape inofensiva en un individuo sano... es una señal de alarma".
Aproximación a los rasgos del perfil psicológico de un asesino serial
De acuerdo a Steven Egger (2000), un asesinato serial se define por las siguientes características:
• Un mínimo de tres a cinco víctimas, con un lapso entre un crimen y el siguiente.
• El asesino no tiene relación con las víctimas. Aparentemente, el crimen ocurre al azar o sin conexión con los otros.
• Los asesinatos reflejan el sadismo del criminal y su necesidad de tomar el control de la víctima.
• Raramente el asesino obtiene una ganancia material; el motivo siempre es de orden psicológico.
• Las víctimas tienen un valor “simbólico” para el asesino; esto se entiende tras ver que hay un método específico para matar.
• El asesino casi siempre escoge víctimas vulnerables, tales como prostitutas, niños, mujeres indefensas, etc.
Motivación en el asesino serial
Los patrones organizado y desorganizado están relacionados con los métodos de los asesinos. En consideración a los motivos, pueden ser ubicados dentro de cinco categorías diferentes (Vronsky, 2004):
1. Videntes: contrariamente a la opinión popular, rara vez los asesinos seriales son dementes o están motivados por alucinaciones o voces en sus cabezas. Muchos pretenden ser exculpados por la razón de la locura. Sin embargo, existen unos cuantos casos genuinos de asesinos en serie que fueron tratados según tal concepción.
2. Misioneros: los llamados “asesinos apostó-licos” creen que sus actos están justificados toda vez que ellos se deshacen de cierto tipo de personas indeseables (prostitutas o miembros de cierto grupo étnico), haciéndole un favor a la sociedad. Los asesinos apostólicos difieren de otros tipos de asesinos seriales, en que sus motivaciones no son sexuales.
3. Hedonistas: este tipo asesina por el simple placer de hacerlo, aunque las características que disfrutan pueden diferir. Algunos pueden deleitarse con la “búsqueda” de perseguir y encontrar una víctima más que 
cualquier otra cosa, mientras otros pueden estar principalmente motivados por los actos de tortura y abuso de la víctima mientras está viva. A pesar de eso, otros pueden asesinar al perjudicado rápidamente, casi como rutina y después gratificarse en actos de necrofilia o canibalismo. Usualmente, existe un fuerte rasgo sexual en los crímenes, aun cuando puede que no sea inmediatamente obvio, pero algunos asesinos obtienen una oleada de excitación que no es necesariamente sexual.
4. Motivados por el beneficio: la mayoría de los criminales que cometen asesinatos múltiples por fines materiales (los sicarios) no son clasificados como asesinos seriales, porque están motivados por el afán de lucro o algún tipo de ganancia económica, en lugar de estarlo por una compulsión psicopatológica. Aun así, existe una delgada línea que separa a ambos tipos de asesinos. 
Por ejemplo, Marcel Petiot, quien operaba en la Francia ocupada por los nazis, podría clasificarse como asesino serial. Petiot se hacía pasar como un miembro de la resistencia francesa y atraía con engaños 
a opulentos judíos a su casa, haciéndoles creer que podía hacerlos salir clandestinamente del país. En lugar de eso, los asesinaba y robaba sus pertenencias, matando a 63 personas antes de que fuera finalmente atrapado.
5. Poder-control: este es el asesino serial más común. Su principal objetivo para matar es obtener y ejercer poder sobre su víctima. 
Tales asesinos algunas veces fueron maltratados de niños, se sienten increíblemente impotentes y a menudo se satisfacen en prácticas que están vinculadas a las formas de abuso que sufrieron ellos mismos. Muchos asesinos de este tipo abusan sexualmente de sus víctimas, pero difieren de los asesinos hedonistas en que la violación no es motivada por lujuria, sino por otra forma de dominación sobre el martirizado.
FASES
Fases de desarrollo del asesino serial
El asesino serial típico sigue un modelo gradual de desarrollo que ha sido descrito en siete fases por el 
doctor Joel Norris (1990), uno de los principales expertos del fbi en el tema. Éstas son:
1. La fase áurea: el proceso se inicia cuando un potencial asesino comienza a retrotraerse a su mundo de fantasías. Externamente puede aparecer normal, pero en su interior existe una zona oscura donde la idea del crimen se va gestando. Su contacto con la realidad se debilita y su mente comienza a ser dominada por sueños diurnos de muerte y destrucción. Gradualmente, la necesidad de liberar sus fantasías dementes llega a convertirse en una compulsión.
2. La fase de pesca: como un pescador que recorre su espinel, el asesino comienza la búsqueda donde cree que puede hallar el tipo preciso de víctima. Puede elegir el patio de una escuela, una zona de prostitución callejera o un barrio conocido por él. 
Lo más probable es que allí termine por marcar su blanco.
3. La fase de seducción: en algunos casos, el asesino ataca sin advertencia (atrapa a una víctima en la calle o fuerza la entrada en una casa y mata a todos los habitantes), pero con frecuencia el asesino siente 
un placer especial en atraer a sus víctimas generando un falso sentimiento de seguridad, burlando sus defensas. Algunos asesinos seriales son tan seductores y tienen una apariencia tan inofensiva, que no les 
resulta difícil convencer a una mujer para que suba a su coche. Otros seducen con la promesa de dinero, trabajo o un lugar para pasar la noche.
4. La fase de captura: consiste en cerrar la trampa. Ver las reacciones aterrorizadas es una parte del juego sádico. Es el momento en el que una mujer que ha subido al automóvil de un desconocido amable descubre 
que van en la dirección equivocada y que la puerta del lado del pasajero no tiene manija.
5. La fase del asesinato: si el crimen es un 
sustituto del sexo, como es frecuente, el momento de la muerte es el clímax que buscaba desde que comenzó a fantasear con el crimen. Es frecuente que muchos psicópatas experimenten un orgasmo mientras matan. Y así como la gente normal tiene sus posiciones favoritas, los asesinos seriales tienen sus preferencias homicidas: algunos disfrutan estrangulando, otros golpeando o acuchillando.
6. La fase fetichista: al igual que el sexo, el asesinato ofrece un placer intenso, pero transitorio. Para prolongar la experiencia, durante el periodo previo al siguiente asesinato, el homicida guarda un fetiche asociado a la víctima. Puede ser desde una billetera hasta un trozo del cuerpo.
7. La fase depresiva: después del crimen, el asesino serial experimenta una etapa depresiva, equivalente a la tristeza poscoital. 
La crisis puede ser tan profunda como para intentar suicidarse. Sin embargo, la respuesta más frecuente es un renovado deseo de matar.
DATOS INTERESANTES
En el mundo, 75% de los asesinos se encuentra en Estados Unidos y el estado de California posee la mayor tasa de asesinatos seriales en la historia, seguido de Texas, Nueva York, Illinois y Florida. en Europa, los países más poderosos son los que poseen un mayor índice de asesinos seriales: Inglaterra, Francia y Alemania. Sólo estos tres países poseen 68% de asesinatos en serie en el continente.
90% de los asesinos en serie son hombres.
65% de las víctimas son mujeres.
89% de los asesinatos son a personas de origen blanco.
86% de los asesinos seriales son heterosexuales.
44% de los victimarios inicia sus asesinatos entre los 20 y 30 años de edad. 26% se inicia en la adolescencia y 24% a partir de los 30 años.

Henry Lee Lucas















Henry Lee Lucas (Virginia, 23 de agosto de 1936 - Texas, 13 de marzo de 2001), fue un asesino en serie estadounidense. Nacido en el seno de una familia desestructurada, Henry era el mayor de siete hermanos. Su madre, Viola Lucas, ejercía la prostitución, y su padre, Anderson Lucas, era alcohólico y discapacitado.


INFANCIA

Henry Lee Lucas era el prototipo de psicópata sádico con un historial realmente sangriento, ya que desde su niñez creció en un entorno familiar totalmente desestructurado, lleno de abusos, crueldad y humillación.

Siendo un niño no deseado, era golpeado frecuentemente por su madre, y sometido a maltrato psicológico: continuamente le vestía como a una niña, forzándole a ver cómo ejercía su trabajo de prostituta. La madre también golpeaba al padre, alcohólico, a quien faltaban las piernas, utilizando un carrito para desplazarse. Desnutrido, y sin educación, nunca desarrolló una habilidad que pudiera dar algún significado o valor a su vida. Sus primeras experiencias sexuales, aproximadamente a los 13 años, fueron con animales: violaba ovejas y perros, y desde el primer momento relacionó el sexo con la muerte (al eyacular rajaba el cuello al animal).

En 1950 murió su padre en extrañas circunstancias: tras una discusión con Viola abandonó la casa, y al día siguiente fue encontrado congelado en el bosque. Tras su muerte Henry abandonó definitivamente su casa e inició una prolífica carrera delictiva con pequeños robos, ingresando pronto en reformatorios y finalmente en la cárcel, dónde probó el sexo con humanos por primera vez. Salió en libertad por poco tiempo en 1959 y volvió a su casa donde, tras una fuerte discusión con su madre, terminó seccionándole el cuello con una navaja y luego tuvo sexo con su cadáver por varias semanas hasta que el cuerpo se descompuso.

LA SOCIEDAD HENRY-OTTIS TOOLE

Ottis tenía un pasado bastante complejo. Comenzó vistiéndose de niña a los 7 años, a los 11 tuvo una larga relación sexual con su hermana Drusilla, que duró hasta que ésta ingresó en un reformatorio. Luego, mantuvo relaciones con un vecino homosexual, combinando sus aficiones sexuales con las de pirómano. Incendiaba una casa y cuando esta ardía, Ottis se masturbaba contemplando el espectáculo. A los 13 ofrecía felaciones a los borrachos de su barrio. Cometió varios robos y acabó en el reformatorio. Entró y salió varias veces más de la cárcel por diversos motivos. A pesar de ello, Ottis tenía responsabilidades, por el día cumplía rigurosamente con su jornada laboral, mientras que por la noche se dedicaba a sus aficiones pirómanas o a sus deseos sexuales.

Henry y Ottis formaron una pareja perfecta. Henry no era demasiado fuerte, pero sí inteligente, y Ottis era capaz de tumbar de un puñetazo a cualquiera, y al no ser demasiado inteligente vio en Henry a una especie de iluminado.

La autopista I-35, que cruzaba todo el país, se convirtió en su particular coto de caza privado. Viajaban en destartalados coches, y para ahorrar gastos solían vivir y dormir en ellos. Como nunca se lavaban ni se cambiaban de ropa, el coche les permitía sobrevivir[cita requerida]. A pesar de su mal aspecto y su mal olor eran simpáticos y sabían congeniar con las personas, y cuando se ganaban la confianza de alguien, le mostraban el otro lado de su oscura personalidad matándole, abusando sexualmente de él y descuartizándole. Nunca mataban a dos personas en el mismo sitio, y después de sus matanzas solían descuartizar los cadáveres y repartir los miembros por todo el país, lo que hizo muy difícil a la policía la reconstrucción de los casos. La especial habilidad de Henry para matar y no ser descubierto les permitió cometer sus atrocidades por todos los Estados Unidos durante varios años.
A Henry le gustaba asesinar a mujeres de ojos grandes y grandes senos. Primero fornicaba con ellas, se quedaba insatisfecho, las acuchillaba o retorcía el cuello y luego las volvía a penetrar, pues disfrutaba mucho más fornicando con un cadáver que con un ser vivo. Ottis, por su parte, prefería violar hombres, obtener placer sexual y luego matarles a tiros. No le gustaban los cuchillos, y disfrutaba con la sensación de "cowboy" que recorría su cuerpo después de matar a alguien a bocajarro.
Otras veces, en señal de amistad Henry ayudaba a Ottis en sus actividades pirómanas. La ocasión en la que más disfrutaron fue cuando quemaron una casa con un anciano dentro. Contemplaron desde la calle cómo el anciano pedía ayuda por la ventana y moría abrasado, y Ottis culminó la experiencia masturbándose allí mismo.
Las semanas en que Ottis regresaba a su casa a trabajar, Henry seguía en solitario, dedicándose exclusivamente a las mujeres. En una ocasión, en 1978, conoció a una chica en el estacionamiento de un edificio, y le invitó a subir a su casa. Con la única ayuda de su "encanto" personal Henry la convenció de tener relaciones sexuales, y ella aceptó pensando que Henry era un tipo normal, pero cuando Henry comprobó, como de costumbre, que no podía llegar a la eyaculación, la acuchilló, volvió a penetrarla y tras el clímax le clavó una navaja por el ano.
A principios de los años 1980 entró en escena la sobrina de Ottis, Becky Powell. Tenía 15 años, pero se comportaba como si tuviese 10. Ottis la invitó a acompañarles en sus viajes y Becky aceptó encantada. Con ella innovaron en sus técnicas, el nuevo procedimiento consistía en enviar a Becky a llamar a las puertas de las casas, esperar a que abriesen y entonces entrar todos en manada. Becky se lo tomaba como un juego y pronto les cogió mucho cariño, especialmente a Henry, quien la convirtió en su novia oficial. Esa relación trajo problemas en la amistad entre Henry y Ottis, ya que Henry decidió tomarse en serio su nueva relación.
Al poco tiempo la pareja empezó a trabajar cuidando a una anciana, Kate Rich, con quien estuvieron varios meses hasta que Henry decidió reemprender el camino de nuevo, acabando en una granja de predicadores denominada House of Prayer. Vivieron allí hasta que Becky sintió nostalgia de su hogar, y pidió a Henry que la dejase ir a Florida a ver a su familia. La idea no gustó a Henry, que sabía que si Becky iba con su familia ésta le apartaría de él, pero finalmente acabó cediendo. Iniciaron el viaje en auto-stop hasta que tuvieron una discusión en medio de la autopista. Henry zanjó el asunto clavándole un cuchillo en el corazón, y seguidamente fornicó con el cadáver en el que, según comentaría posteriormente, fue el mejor polvo con Becky. Acababa de cometer el mayor error de su vida. No contento con ello fue a ver a Kate Rich diciéndole que Becky quería verla, y en el camino hacia la granja Henry acuchilló a la anciana sin ningún motivo.


Theodore "Ted" Robert Cowell Bund






Theodore "Ted" Robert Cowell Bundy (24 de noviembre de 1946 en Burlington,Vermont- 24 de enero de 1989 en Florida) fue un asesino en serie. Los analistas estiman que el número de sus víctimas podría rondar las cien mujeres, muy lejos de los números oficiales de alrededor de treinta y seis.


INFANCIA


Hijo biológico de un veterano de la fuerza aerea, a quién nunca conoció, y de Louise Cowell, vivió sus primeros catorce años en casa de sus abuelos maternos. Tiempo en el que creyó que sus abuelos eran sus padres y que su madre era su hermana mayor.


En 1950, Ted y su madre, se mudaron a Tacoma (Washington) con otros familiares. Ahí, Louise conoció a Johnnie Culpepper Bundy, un cocinero del ejército con el que se casó en mayo de 1951 y del que Ted posteriormente adoptó el apellido. El matrimonio tuvo cuatro hijos, pero Ted nunca creó un lazo afectivo con el marido de su madre.


Primero delitos y asesinatos



Antes de comenzar a asesinar perpetró una serie de hurtos en casas ajenas y comercios mientras estaba ebrio.


El 4 de enero de 1974 entró en el cuarto de la universitaria Joni Lenz, de 18 años, la golpeó con una palanca metálica y la violó con una pata de la cama. Al día siguiente, la chica fue hallada malherida y sobrevivió con daño cerebral permanente. Bundy contaba con 27 años.


Veintisiete días después atacó a la estudiante en psicología de la universidad de Washington Lynda Ann Healy, de 21 años. Bundy entró en su dormitorio, la dejó inconsciente con un golpe y la sacó de la escuela. Nadie notó la ausencia de la joven hasta el día siguiente. La policía no estableció ninguna conexión entre las dos agresiones y tampoco se hicieron mayores pruebas ni estudios de la escena del crimen. Los restos de Lynda Ann fueron descubiertos un año después en una montaña cercana.


Comienzan los asesinatos en serie



Durante la primavera y verano de 1974 desaparecieron varias universitarias. Se calcula que fueron ocho víctimas a las que atacó de noche, hasta que comenzó a hacerlo de día. La policía había iniciado una investigación y contaba con descripciones acerca de un hombre que solicitaba ayuda a chicas que jamás volvían a ser vistas. El individuo tenía la particularidad de ir cargado con libros y llevar un brazo enyesado o en cabestrillo. También hubo testigos que observaron a un hombre que solía tener "problemas" para arrancar suVolkswagen el cual había sido visto rondando el sitio donde desaparecieron dos de las jóvenes asesinadas.


El 9 de febrero de 1974, Carol Valenzuela, de 20 años, desapareció de Vancouver (Canadá). Su cadáver no fue descubierto hasta el mes de octubre junto a otro cuerpo sin identificar.


El 11 de febrero de 1974, desapareció Nancy Wilcox, de 16 años. Su cuerpo nunca fue hallado.


El 12 de marzo de 1974 Donna Mason, de 19 años, fue vista por última vez mientras iba a un concierto de jazz del campus.


El 17 de abril, Susan Rancourt de 18 años, caminaba por los jardines del Central Washington State College cuando desapareció.


Un mes más tarde desapareció Roberta Parks, de 20 años, quién había quedado con unas amigas para tomar café, nunca llegó. Parks se encontró con un hombre aparentemente lesionado que le pidió ayuda para subir unas cosas a su auto. Jamás fue vista de nuevo.


El 1 de junio de 1974, Brenda Ball, de 22 años, salió de la Taberna Flame en Burien (Washington) después de comentar a sus amigos que iba a buscar a alguien que la llevara a Sun City (California). La última vez que la vieron estaba hablando con un hombre con el brazo en un cabestrillo. Diecinueve días más tarde se descubrió que Brenda nunca llegó a su destino.


El 11 de junio de 1974 Georgann Hawkins, de 18 años, perteneciente a la fraternidad Kappa Alpha Theta de Seattle, desapareció después de despedirse de su novio e ir a buscar unos libros para un examen de castellano. Su compañera de habitación y la encargada del dormitorio reportaron su desaparición a la mañana siguiente.


El 14 de julio, la universitaria Janice Ott dejó una nota a su compañera de habitación avisándole que se iba en bicicleta al parque Lake Sammamish. Allí se le vio conversar con un hombre que tenía el brazo enyesado y le pedía ayuda para cargar libros en su auto. Días después volvió al mismo parque y secuestró a Denise Naslund, la cual pasaba el día con su novio y amigos. Los restos de Janice y Denise fueron encontrados en agosto de 1974 en el mismo lago Sammamish.


Bundy despistaba a la policía porque sabía como alterar su aspecto físico. Se cambiaba el peinado, se dejaba crecer barba y bigote o se los afeitaba. También cambió de residencia y se mudó a Midvale (Utah), donde el 30 de agosto de 1974 se matriculó como estudiante en la Facultad de Leyes en la Universidad de Utah.


El 18 de octubre de 1974 asesinó a Melissa Smith, la hija del sheriff local. La secuestró mientras ella iba a pasar la noche en casa de una amiga. Su cadáver fue encontrado nueve días después en Summit Park.


El 30 de octubre desapareció Laura Aimee, de 17 años, cuando volvía de una fiesta de Halloween. Su cadáver fue encontrado en losmontes Wasatch mostrando signos de haber sido golpeada en la cabeza con una cuña de metal y violada.


La policía inició una investigación y descubrió similitudes en el modus operandi con algunos asesinatos ocurridos en Washington. Entre ambas comisarías elaboraron un retrato hablado del posible aspecto que tendría el asesino.


PATOLOGIA



En diciembre de 1987, Bundy fue examinado durante siete horas por Dorothy Otnow Lewis, profesora de la New York University Medical Center. Lewis lo diagnosticó como un maníaco-depresivo cuyos delitos ocurrían normalmente durante los episodios depresivos.1 Bundy le explicó con detalle su infancia, en especial su relación con sus abuelos maternos, Samuel y Eleanor Cowell. Según Bundy, su abuelo Samuel Cowell era un diácono de su iglesia. La descripción estableció a su abuelo como un tirano abusador, Bundy lo describió como un racista que odiaba a los negros, los italianos, los católicos y los judíos. Además, declaró que su abuelo torturaba animales, golpeando al perro de la familia y maltratando los gatos de los vecinos. También le dijo a Lewis que su abuelo mantenía una gran colección de pornografía en su invernadero, donde, según sus familiares, Bundy y un primo se colaban a mirar durante horas. También dijo que Samuel Cowell montó en rabia violenta cuando el tema del padre del muchacho era tocado por familiares que solían expresar escepticismo ante la historia que daba.2 Bundy describió a su abuela como una mujer tímida y obediente, que ingresaba de forma esporádica a los hospitales para someterse a tratamiento por depresión.3 Hacia el final de su vida, Bundy dijo que se convirtió en agorafóbica.


Julia, la tía de Bundy, recordó un incidente perturbador que tuvo con su joven sobrino. Después de recostarse para tomar una siesta, Julia se despertó rodeada de cuchillos de cocina de la familia Cowell. El pequeño Ted, de tan sólo tres años de edad, estaba al pie de la cama sonriéndole.


Bundy usó tarjetas de crédito robadas para comprar más de 30 pares de calcetines, mientras se escondió en la Florida;. Él mismo se consideraba como fetichista de los pies.


En la entrevista con Dobson, antes de su ejecución, Bundy dijo que la pornografía violenta desempeñó un importante papel en sus crímenes sexuales. Según Bundy, cuando era un niño encontró "fuera de casa, en el supermercado local, en una farmacia, pornografía suave... Y de vez en cuando encontraba libros pornográficos con contenido más explicíto..."7 Bundy dijo, "Sucedió en etapas, poco a poco, mi experiencia con la pornografía en general, pero con la pornografía que presenta un nivel alto de violencia sexual, una vez que te vuelves adicto a ella, —y esto lo veo como una especie de adicción igual que otros tipos de adicción— comienzas a buscar todo tipo de material con cosas más potentes, más explícitas, más gráficas. Hasta llegar a un punto en el que la pornografía va tan lejos que comienzas a preguntarte como sería hacerlo en realidad"


Algunos investigadores creen que la permanente insistencia de Bundy de que la pornografía fue un factor contribuyente en sus crímenes fue otro intento de manipulación. Una vana esperanza de impedir su ejecución diciéndole a Dobson lo que quería oír.


En una carta escrita poco antes de su fuga de la cárcel de Glenwood Springs, Bundy manifestó "He conocido a personas que irradian vulnerabilidad... Sus expresiones faciales dicen: Tengo miedo de ti. Estas personas invitan al abuso... Esperando ser lastimadas, ¿sutilmente lo fomentan?"


En una entrevista de 1980, hablando de la justificación en las acciones de un asesino en serie, Bundy dijo: "¿Que es uno menos? ¿Qué significa una persona menos en la faz del planeta?"


Cuando los detectives de Florida pidieron a Bundy que les dijera en dónde había dejado el cuerpo de Kimberly Leach para darle paz a la familia, él supuestamente replicó: "Pero si yo soy el hijo de puta más duro que jamás han conocido.




















Conslusión

El asesino serial que por lo general se observa, es un varón, que ataca generalmente a las mujeres, introspectivo, reservado,distante, de buenos modales,agradable, sin amigos,solitario en sus decisiones, tímido, estudioso, suele ser fácilmente descartado como sospechoso por su historia de persona pasiva que no reacciona frente a la violencia, ordenado, meticuloso, pulcro.


Es particularmente propenso a delinquir cuando ha sufrido una perdida en su autoestima, se han burlado de el, ha sido rechazado sexualmente o se ha cuestionado su masculinidad.


Compensa el acto delictivo, esta situación de minusvalía recuperando su narcisismo, su egocentrismo y su vanidad hasta estar convencido de su poder al llevar a cabo sus delitos y escapar de las investigaciones policiales por ser mas inteligente. 


Tras una fachada distante existe una profunda agresividad que no puede expresar. imagina escenas que luego interpreta en agresiones..


En el momento del crimen, se excita mucho, se transforma, adquiere la seguridad que le falta y el impulso sexual asume el control de sus acciones. por lo general luego del hecho no tiene remordimiento, no tiene piedad por sus victimas ni esta preocupado por las connotaciones morales de sus actos a los que aluda sin mayor resonancia afectiva.

Para saber mas


MESOGRAFÍA

Asesinos en serie
Robert K.Ressler/Tom Sachtman
http://books.google.com.mx/books?id=XppM_ae8eScC&printsec=frontcover&dq=ASESINOS+EN+SERIE&hl=es&sa=X&ei=-565T7z2DrPJsQK56oyLDA&ved=0CD0Q6AEwAA#v=onepage&q=ASESINOS%20EN%20SERIE&f=false
Psicokillers: Los asesinos en serie mas famosos de la historia
Juan Antonio Cebrian
http://books.google.com.mx/books?id=L-XINMGNITEC&printsec=frontcover&dq=ASESINOS+EN+SERIE&hl=es&sa=X&ei=-565T7z2DrPJsQK56oyLDA&ved=0CEMQ6AEwAQ#v=onepage&q=ASESINOS%20EN%20SERIE&f=false
Depredadores humanos: el oscuro universo de los asesinos en serie
http://books.google.com.mx/books?id=6raw_VUx_fIC&pg=PA109&dq=ASESINOS+EN+SERIE&hl=es&sa=X&ei=8p-5T--5COmusQL-gIWSCA&ved=0CEYQ6AEwAjgK#v=onepage&q=ASESINOS%20EN%20SERIE&f=false